Leves, pequeñas, muestras de placer,
Cansancio en la piel,
Hoyos de irritacion
Escarbados durante la vigilia,
Tiempos de insomnio,
De cafe seco y mal oliente,
Fechas imposibles,
Pasajes gastados sin dueño,
Vueltas traicioneras que no se dejan conquistar,
Muros tatuados por las direcciones,
El largo abrazo mal inspirado,
Incomodas sensaciones
Traslucidas, averiadas,
La mente corrupta,
Hecha de hilos despreciados,
Gozos increibles
Venidos a menos,
Exaltados en la penumbra,
Pero que, agotados, ya no se perciben,
La danza transmutada en congoja,
La risa devenida en choque,
Y la cristalina superficie seca,
Alli donde se sembraban tormentas
Ahora existe una horca.